Lejos de parecer algo difusos sobre lo que este rediseño ecológico implica en nuestras vidas, aquí de lo que se trata es de ponerlo en práctica de verdad. ¿Quieres saber cómo hacerlo?
Permanece atento a estas 7 recomendaciones que vamos a darte para que tu marca saque el máximo provecho al ecobranding. Un cambio necesario e inevitable, que además de cuidar el medioambiente, tiene muchas ventajas para tu negocio. ¡Empezamos!
Y esto del ecobranding… ¿de dónde sale?
Este cambio de enfoque más eco en el branding se lo debemos a un tipo muy interesante llamado Sylvain Boyer, Director Creativo de Interbrand París.
El nacimiento del concepto coincidió con la paternidad de Boyer en el sentido más literal del término. En el año 2013 nació su hija, y él se dispuso a diseñar con ilusión una tarjeta de nacimiento para enviársela a todos sus amigos y familiares. Pero cuando la mandó a la imprenta, y vio la desorbitada cifra de aquella factura, se dio cuenta de que algo había fallado… Había utilizado demasiados colores. Y, por lo tanto, también demasiada tinta.
“Así que simplemente reduje el número de colores, que inmediatamente se hizo más económico, pero también más ecológico”, reflexionó Boyer.
Algo tan sencillo supuso un antes y un después en su vida. Una revelación. 🚀
Desde ese momento, empezó a investigar, crear y diseñar desde un nuevo enfoque para respetar el medioambiente. Su propósito era que el “ecodiseño” se convirtiera en algo innovador y que todas las marcas lo abrazaran.
Pero pronto quiso dar un paso más allá, y descubrió que no debía quedarse solo con la idea de un diseño más ecológico, sino que éste debía estar acompañado necesariamente de los valores de la empresa.
7 tips para hacer ecobranding de calidad
Podemos considerar la eficiencia como el pilar fundamental del ecobranding, sin duda. Pero necesitamos profundizar un poco más allá porque hay muchos más beneficios que consolidarán los valores de tu marca dándole un carácter más importante. Desde Trescom te lo queremos poner muy fácil:
1. Menos es más (y no solo en el ecobranding). ✂️
La esencia con la que hemos podido construir una marca es un bien muy preciado, un espíritu que nos diferencia de la competencia.
Tu identidad de marca no se va a diluir si decides seguir adelante con el ecobranding, porque seguirá siendo reconocible y además ganarás nuevos valores. No debemos tener miedo por modificar algo de nuestro visual si tiene una intencionalidad que nos proporcione otro posicionamiento que, de seguro, nos va a convertir en referente en nuestro sector.
Seamos prácticos y atrevidos y démosle a nuestra marca lo que merece sin perder un ápice de carácter.
2. Si te estás planteando un rebranding, hazlo desde lo eco. ♻️
Actualizar un logotipo para hacerlo más “sencillo” no es solo un lavado de cara: es la intención visual del cambio hacia la sostenibilidad que, como empresa responsable, queremos llevar a cabo. Cambiar es necesario. Prueba de ello son todos los rebranding que seguramente detectas en tu sector y de los que se hacen eco (el otro eco) portales especializados como brandemia.org.
Para Sylvain Boyer, este cambio debe empezar a hacerse desde una perspectiva ecológica; y que un logotipo tenga menos colores, las líneas más finas o menos relleno debe responder a una conjunción entre estética y medioambiente.
3. Si lo estás haciendo bien, ¡díselo al mundo! 📈
Los datos nunca mienten y siempre son un reclamo para comunicar lo que estás haciendo y cómo de bien lo haces.
Menos “mancha” de un logotipo y unos colores menos potentes se traduce en menos tinta a la hora de imprimir. Estamos hablando de que si reducimos hasta un 35% el relleno de nuestro logo podemos salvar millones de árboles al año.
Desde la página de Ecobranding-Design.com podemos comprobar como en marcas muy conocidas, la reducción de mancha, se nota. Y lo mismo le puede suceder a nuestra marca. Siempre va a ser un argumento atractivo para vendernos como una marca eco y que hace las cosas bien.
4. El ecobranding va mucho más allá de decir que haces “RSC”. 🥇
Al igual que no solo el logotipo te define como marca, también puedes ser eco más allá de él. Si de verdad apuestas por esta corriente, no te quedarás en el “muy bien, ya tengo mi eco-logo”; y serás más de los que se preguntan: “¿Y ahora qué?”.
Debes seguir siendo eco en otros aspectos de tu compañía como en la optimización de los recursos, la redefinición de la ética empresarial y el aumento de la eficacia y eficiencia en los procesos.
No nos quedemos solo en lo visual y asumamos que el primer paso hacia el ecobranding es entender que es un proceso es lento y requiere tiempo, pero que es necesario para hacer un cambio real y evidente.
5. La obsolescencia programada es la némesis del reciclaje y debemos combatirla. ❤️
La reducción de costes debe primar en nuestro nuevo enfoque, y debemos ser creativos también en la búsqueda de soluciones para ser más solidarios.
Optimizar el envase para reducir costes no es usar un papel reciclado y ya está. Consiste en crear un “packaging” atractivo, resistente y que, si se diera el caso, tuviera una nueva funcionalidad fuera de la de ser un envase. Con esto el impacto medioambiental se reduce.
6. A la hora de imprimir, primero la funcionalidad y luego la forma. ⌛
Aquí tiene cuatro claves indispensables para hacer una impresión más eco y responsable con el medioambiente:
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- Emplea las tipografías que usan menos mancha de tinta.
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- Apuesta por los papeles ecológicos de colores para ahorrarte una tinta.
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- Evita que las tintas usadas superen el 100% del CMYK.
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- Reduce el número de tintas en las imágenes que sean menos complejas.
7. No la percibes, pero la contaminación digital está ahí y la puedes evitar. ⛔
El ecobranding nos hace pensar también en la necesidad de combatir la contaminación digital. Estos cuatro consejos marcarán la diferencia para tu empresa:
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- Utiliza interfaces oscuras que consumen menos energía en las pantallas.
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- Optimiza tus imágenes al tamaño y calidad web con una resolución de pantalla de 72ppp.
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- Prioriza la información y ten cuidado de no masificar el envío de mails.
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- Elige un hosting verde suministrado por energías renovables.
Si te ha conquistado el ecobranding…
… ¡Eres de los nuestros! Si sigues pensando en hacer del ecobranding tu nueva arma de comunicación, tenemos muchas cosas en común. Apostar por la sostenibilidad entendiendo que no se trata de una moda pasajera allana el camino y te predispone a conseguir que tu marca sea una alternativa sostenible de manera creativa y estética.
Esperamos que estos 7 consejos te sirvan como guía para seguir profundizando en la importancia de aportar valor sostenible, eficiente y en equilibrio con el medioambiente para tu marca. Y si tienes alguna duda, ya sabes dónde encontrarnos. 😉